¿Un Tatami o una cama en el suelo?
7.9.16
Te preguntarás cuál es la mejor opción... o si lo son ambas. Las dos tienen grandes diferencias en el Feng Shui. Vuelve La Butaca con fuerza en este nuevo curso y vas a aprender mucho, lo sé.
Natalia y Jose, Mallorca
¡Hola Yasmina! Necesito que me ayudes porque ando un poco desesperada. Estamos amueblando nuestra nueva casa y a mi siempre me ha hecho muchísima ilusión tener un Tatami en el dormitorio, porque soy una apasionada de la cultura de Japón y todo lo que la rodea. Pero mi novio dice que no cree que eso sea 'muy bueno' estar casi a ras del suelo durmiendo, y como ambos somos seguidores de tu blog me ha dicho que te lo pregunte. ¿Tú qué crees?.
Respuesta
Un colchón o cama muy baja casi a ras del suelo no tiene nada que ver con un Tatami. Es más, según el FS no es recomendable dormir 'casi en el suelo', pero las particularidades del Tatami hacen que esto sea posible. Ahí sus diferencias. El colchón dispuesto en el suelo es negativo en el FS ya que impide que circule el chi y perjudica el descanso, por lo tanto no es lo más apropiado.
Pon un Tatami en tu dormitorio
@ Primero se coloca una base de madera (esto es muy importante) para dar altura al Tatami y al colchón.
@ Los verdaderos Tatamis están fabricados con paja de arroz, y en muchos casos recubiertos con una estera hecha de junquillo.
@ Aportan calor en invierno aislando el frío del suelo durante esta época, en cambio en verano la sensación es totalmente diferente, aportando más fresco. Incluso son capaces de absorver el exceso de humedad en la habitación.
@ Inspira paz, calma y relajación.
@ No sólo están destinados a los dormitorios, pueden formar parte también de la habitación de los peques como zona de juegos o en el espacio de relajación.
Vía |
En Japón dormir sobre un Tatami simboliza buena fortuna y vida próspera. Tienen un ritual para su colocación en los espacios abiertos: nunca deben situarse en cuadrícula ni coincidir en ningún punto de las tres o cuatro esquinas de las esteras, porque lo consideran un mal augurio.
Desde luego que es una forma muy diferente de adaptar y decorar un dormitorio de pareja.
Apuesto por él, ¿y tú?.
Gracias por acompañarme un curso más